Ha de designar a una empresa funeraria, la cual se pondrá en contacto con el Instituto Médico Forense o el hospital donde se haya producido el fallecimiento para que se le informe en cuanto se reciba el permiso de inhumación.

El lugar y la organización del sepelio serán determinados por la persona con facultad para encargarse de las exequias del difunto: cónyuge, padres, hijos mayores de edad, hermanos o hermanas, etc. En cualquier caso, es preferible que se alcance un consenso familiar.

La empresa funeraria puede encargarse de los trámites administrativos para todos los actos consiguientes al fallecimiento: certificado de defunción, permiso de inhumación, autorización de cierre del féretro, autorización de inhumación, autorización de cremación, etc.

El oficial de la policía judicial de la brigada criminal o un agente del hospital se encargará de declarar la defunción y el servicio del Registro Civil del ayuntamiento donde se haya producido el fallecimiento establecerá el certificado de defunción. No es necesario que la familia se desplace al ayuntamiento para la expedición del certificado de defunción. Se pueden entregar las copias del acta al agente funerario designado.

El permiso de inhumación es un documento judicial que autoriza la restitución del cuerpo a la familia y, por consiguiente, la organización del sepelio. La fiscalía del Tribunal Judicial de París (le parquet de Paris) es quien lo entrega. Se restituirá el cuerpo a la empresa funeraria designada por la familia.

Si su ser querido disponía de un seguro de viaje, este puede asumir la totalidad o una parte de las gastos funerarios (repatriación, etc.). De lo contrario, el Fondo de Garantía de las Víctimas de Actos Terroristas y otras Infracciones (FGTI) asume los gastos funerarios y los gastos vinculados (féretros, cremaciones, traslados, etc.).

El FGTI puede abonar directamente los gastos funerarios a la empresa funeraria, dentro del límite de un coste medio. Si ha corrido con algunos gastos, conserve las facturas para el FGTI.

Ha de abrirse un expediente de sucesión. Por lo general, esto se lleva a cabo en el país donde el difunto tenía su residencia habitual.

Ha de informarse a las compañías de seguro con las que se haya podido suscribir seguros de decesos o seguros de vida.

No olvide informar a las distintas administraciones, organismos de protección social o seguros y a su empleador del fallecimiento de su familiar. Según las disposiciones vigentes, algunos pueden aportarle una ayuda.